jueves, 10 de mayo de 2012

Jueves, día de sonrisas.

Y al fin llegué a sonreír, a acordarme de él y seguir sonriendo como si nada, a verlo andar por el pasillo y seguir sonriendo como si nada,a seguir sonriendo por mucho que se me pasara por delante. El sol brillaba en el cielo como si estuviésemos en pleno junio, y mi mis ojos volvían a tener ese brillo de felicidad que tanto me gustaba, tanto como ser feliz. Al fin pude disfrutar de nuestras típicas bromas, y de todo aquello que veía gris hasta hace dos días. Y si, sé que puedo hacerlo, sé que podré olvidarle, porque es lo que estoy haciendo ahora. Vendrá a pedirme perdón cuando yo ni siquiera le esté escuchando, y eso le hará darse cuenta de que aunque más vale tarde que nunca, fue demasiado tarde. Porque poco a poco he conseguido olvidarle, ya no me interesa que me mire, y si me mira que me vea sonriendo, feliz, para demostrarle que en realidad es así como estoy, y nunca más logrará quitarme esa sonrisa; tampoco me interesa su perdón, después de haberme hecho pasar malos momentos; ni tampoco necesito escuchar su voz para sentirme completa. Ahora solo necesito tiempo, para olvidarle del todo y hacer como si nunca hubiese pasado nada. Solamente quiero cantar, reír, gritar, saltar, llorar de felicidad y hacer todo aquello que hacía antes. Porque hoy me sentí viva, me sentí verdaderamente yo.

2 comentarios: